Wiki Lovecraft
Advertisement
Marca de la Lengua Sangrienta

La Secta de la Lengua Sangrienta es una vetusta secta africana que adora al Dios de la Lengua Sangrienta, uno de los avatares de Nyarlathotep.

Descripción[]

Este culto inició su actividad al oeste de Kenia, pero se fue extendiendo por todo el continente e incluso cabe la posibilidad de que tenga presencia en otros lugares terrestres. Si bien suele estar cerrado a personas no africanas, todos los adoradores de Nyarlathotep son bienvenidos al culto.

El antropólogo Nigel Blackwell escribió un libro llamado "Sectas Oscuras de África" en la que se comentan algunos detalles sobre este culto. Gracias a este texto, se sabe que realizan rituales en la Montaña del Viento Oscuro, en los Montes Aberdare, los cuales incluyen asesinatos de personas secuestradas en la vecindad, así como decapitaciones y escarificaciones con el emblema del culto. No es por ello extraño que la gente que viviera cerca de los centros de culto estuviera aterrorizada, especialmente cuando los gobiernos coloniales (allá por el año 1928) se desentendieran del asunto, achacándolo a simples reyertas tribales.

La más importante de sus celebraciones es el ritual orgiástico una vez cada cinco años, en el cual su deidad se manifiesta, provocando terribles tormentas en la zona. Estos rituales están dirigidos por una suma sacerdotisa, elegida a los 14 años y entrenada en las artes mágicas en la propia Montaña del Viento Oscuro por inhumanos sirvientes de Nyarlathotep. En cuanto a los seguidores, aquellos que realizan los sacrificios llevan un pañuelo rojo en la cabeza como referencia a su dios, usando un machete como arma.

La Secta en Nueva York[]

Muchos de sus miembros son emigrantes ilegales keniatas que han falsificado documentos de ciudadanía americana. Sin embargo, en los últimos años, sus filas se han engrosado a partir de elementos degenerados de los barrios bajos neoyorquinos, y la raza ya no es un requisito previo importante para ser miembro. El nombre de la secta surge de uno de los aspectos de Nyarlathotep en el que ostenta un tentáculo color rojo sangre en lugar de cara. El cuartel general lo tienen en una tienda de Harlem que vende parafernalia tribal africana. Los ritos tienen lugar en el sótano, que ha sido convenientemente agrandado para dicho uso. La tienda está regentada por Silas N'Kwane, mientras que el hechicero de la secta es Mukumga N'Dari. Los asesinos de la Lengua Sangrienta suelen utilizar el pranga (un machete largo africano) en sus ataques, aunque los miembros americanos han utilizado a veces pistolas. Los asesinos o verdugos de la secta llevan un gorro de aspecto terrorífico, con una tira de color rojo que cuelga de la frente.

Ritos de la Lengua Sangrienta[]

M'Weru

Nueva York[]

Aunque las reuniones de la secta son semanales, los ritos sólo tienen lugar una vez al mes, con la presencia de decenas de sectarios.

El rito requiere al menos dos víctimas, que normalmente son secuestradas en otras partes de Harlem el mismo día, y llevadas a la tienda poco antes de que empiece. Si algún investigador ha sido secuestrado para ese propósito, será llevado antes, en el interior de una caja de embalaje. El resto de los sectarios empezará a llegar poco después de la 1 de la madrugada y el rito empezará a la 1:30h. Cualquiera que vea entrar a docenas de sectarios en un lugar tan pequeño como La Casa del Ju-ju no podrá por menos de pensar que tiene que haber otras habitaciones o un sótano.

Los vecinos pueden dar una indicación bastante exacta de cuándo empiezan los rituales. Durante los ritos no hay guardias en el patio, y la mayoría de los sectarios entran entre la 1 y la 1:30h. Al llegar al pasillo, los sectarios se quitan la ropa y se ponen tan solo los grotescos gorros de la secta, poniéndose a cantar y bailar durante horas, hasta que Mukunga determina que se ha llegado a un auténtico frenesí. Entonces graba la marca en la frente de las víctimas y pronuncia una invocación en la que se puede distinguir perfectamente el nombre de Nyarlathotep. Las víctimas son arrojadas después al pozo del Chakota, tras levantarse el bloque de piedra, y de vez en cuando un sectario se arroja voluntariamente para ser devorado, como sacrificio para demostrar su fe.

Durante los ritos, Mukunga lleva puesto el manto de plumas y utiliza las garras para marcar en las víctimas la runa de la secta. También atacará con ellas si le interrumpen unos intrusos. Si los esfuerzos de la congregación no son suficientes para reducirlos o matarlos a los investigadores, Mukunga convocará a un horrendo cazador (sólo él puede hacerlo, y sólo una vez por noche). Con el ruido y la locura de los ritos, los intrusos podrían entreabrir la puerta de la cámara de los sacrificios y echan una mirada podrán ver sin ser vistos.

Como puede imaginarse, la secta no tolera de buen grado las visitas imprevistas, y todos los sectarios perseguirán a los intrusos en un intento de capturarlos y utilizarlos como víctimas sacrificiales. En la cámara no hay armas y les será difícil echar mano de las que llevan en sus ropas, que están amontonadas a la entrada, pero si los persiguen hasta la tienda allí podrán coger las lanzas, cuchillos y palos expuestos. Tal persecución durará hasta que los investigadores sean capturados o muertos, o consigan escaparse. Téngase en cuenta, sin embargo, que una turba enloquecida de sectarios desnudos persiguiendo a personas por el centro de la Avenida Lenox probablemente atraiga la atención de la policía. 

Miembros notables[]

Mukunga.
  • M'Weru
  • Mukunga N'Dari - Sumo sacerdote de la Secta de la Lengua Sangrienta en su rama de Nueva York. Este poderoso enemigo disfruta lo indecible eliminando a los adversarios de su dios. Conoce la situación de la montaña del Viento Negro, sabe lo que se oculta en la caverna del templo, y tiene algunos indicios acerca del plan de Nyarlathotep, pero jamás revelará a nadie esta información a menos que se le obligue mágicamente. Si se ve a punto de morir, su último acto será contactar con Nyarlathotep para pedirle que le vengue. Si llega a saber que los investigadores se dirigen a Londres se pondrá en contacto con Edward Gavigan para advertirle, pero sólo si está convencido de no poderles liquidar por su cuenta. Sabe algo de la secta china, pero no tiene manera de alertarles si los investigadores deciden ir primero a Shanghái, y desconoce por completo las actividades de Huston en Australia y en cualquier otra parte. De día trabaja en los muelles, y vive en una paupérrima habitación del East Side, en la calle 129, en la que sólo hay una colchoneta, algo de ropa y muchos grabados keniatas, la mayoría de los cuales tienen algún significado místico. A veces se le ocurre seguir a caminantes distraídos por Central Park. Se le puede encontrar también en el bar de Mabel la Gorda, un tugurio en la calle 139 esquina con la 6ª Avenida, que es bastante popular entre los nativos africanos. Aunque raramente se les ve por allí, los blancos pueden ir perfectamente. Los habituales conocen a Mukunga y dicen que tiene el poder, el ju-ju. Llevan razón.
  • Silas N'Kwane - Encargado de la Casa del Ju-Ju, en cuyo sótano está la sede de la secta en Nueva
    Silas N'Kwane

    Silas N'Kwane.

    York.
  • Chakota: el Chakota se compone de docenas de rostros humanos unidos a una masa más o menos cilíndrica y vermiforme de músculos de aspecto enfermizo veteados de color púrpura. Las caras lloran, gimen y aúllan de una forma terrible. El Chakota puede moverse, pero no salir del pozo, que mide 1,80m de hondo y 1m de diámetro. Las caras del chakota son las de sus víctimas, puesto que cada nueva víctima añade su cara a las anteriores al cabo de unas dos horas de ser digerido su cuerpo. El monstruo mata mordiendo y devorando a sus víctimas con sus múltiples caras. No hay un límite significativo al número de víctimas que puede devorar, puesto que su masa puede extenderse indefinidamente. Cualquiera que vea en él el rostro de una persona conocida puede sufrir una pérdida de cordura. Cualquiera que sea mordido perderá cordura.

Artefactos de la Secta de la Lengua Sangrienta[]

  • Manto del Sumo Sacerdote: un chal de vivos colores cubierto de plumas, hecho de flamenco y de martín pescador, probablemente del África Oriental.
  • Garras del León: se trata de dos juegos de garras auténticas de león, cosidas a una especie de guantes, de manera que puedan llevarse puestas en las manos. El resultado es lo suficientemente robusto como para que estos dos elementos rituales puedan utilizarse como armas.
  • Sectas oscuras de África: el libro tiene un ex-libris que indica que es propiedad de la Universidad de Harvard. Está en inglés. Publicado recientemente, sólo se distribuyeron trece ejemplares (las autoridades consiguieron quemar el resto). El libro contiene un hechizo que permite crear zombies.
  • Máscara de Hayama: una máscara diabólica africana aparentemente tallada en madera, aunque un historiador natural permite establecer que no se trata de madera alguna conocida en la Tierra. Representa una combinación de cuatro dioses exteriores, y fue tallada por un gran hechicero del Congo. A primera vista, la Máscara no posee aditamento alguno para mantenerla fija en su sitio, pero cuando alguien la aprieta contra su cara, se adhiere como si se tratara de un ser vivo y se agarra al rostro del portador (un efecto inquietante, incluso de contemplar), quien no se la puede quitar, ni siquiera con ayuda de otros. Al cabo de unos 15 segundos de llevar puesta la máscara, las pupilas de quien la lleva parecen expandirse hasta el tamaño de las órbitas de los ojos. En ese momento y durante los siguientes 30 segundos el portador tiene una visión quizá excesivamente clara de uno de los cuatro dioses exteriores. A continuación, la Máscara cae de la cara de quien la lleve.
  • Un bol de cobre bruñido: grabado con runas y signos no reconocibles. Un experto en los Mitos puede identificarlo como teniendo que ver con el conjuro Enviar Sueños, que se detalla en un pergamino árabe en poder de la Fundación Penhew (en Londres). Aunque el bol parece de cobre, en realidad está construido con un metal ajeno a la ciencia terrenal, y que los sectarios denominan "el cobre de allá arriba".
  • Un cetro grabado: de origen africano y hecho en madera de baobab, está recubierto de antiguas runas, quizás reconocibles por quien domine los jeroglíficos. Las runas dicen: "Nyambe, tu poder es mío." Nyambe es el nombre que se da al dios supremo, en el oeste y el sur de África. El cetro no es un artefacto de los Mitos.
  • Una cinta de metal gris: con runas de los Mitos de Cthulhu, se puede determinar que se trata de una especie de artefacto protector que tiene que ver con Nodens. Cuando se coloca en la cabeza, la cinta protege contra los ángeles descarnados de la noche: ninguno de ellos atacará al portador de la cinta a menos que este le ataque primero.

Legado[]

Fuentes[]

  • La Llamada de Cthulhu: Las Máscaras de Nyarlathotep (juego de rol).
Advertisement